El colectivo de mujeres y personas LGTBI+ ha sido históricamente relegado a las miradas y los roles que le impuso la sociedad patriarcal. Esta situación a nivel global comenzó a visibilizarse a partir del surgimiento de lo que en nuestro país se conoce como “la marea verde”, un color que es sinónimo de la Campaña en favor del Aborto Legal, Seguro y Gratuito en Argentina, pero que alzó la voz y puso en el centro de la escena las demandas de un sector de la sociedad oprimido y violentado por la hegemonía machista. 

 

Crecimos en una sociedad cruel con todo lo aquello que no encaja en la “normalidad heterosexual binaria”, crecimos también en una sociedad que naturalizó la desigualdad estructural basada en la violencia contra las mujeres. Es por eso que la perspectiva de género es imprescindible y será transversal a cualquier línea de acción que desde IDEAL AVELLANEDA impulsemos, incorporando los derechos establecidos en la Ley de Identidad de Género y planteando un cambio de paradigma en relación al abordaje de las violencias por motivos de género. 

 

Aún queda todo por hacer, porque no hablamos de la gestión de una demanda particular sino de la transformación profunda de la sociedad toda y el orden político que nos damos para construir nuestras relaciones comunitarias. Pero no queremos repetir patrones, vinimos a transformarlo todo, por eso el abordaje de esta problemática estructural requiere del compromiso del Estado y de la ciudadanía en su conjunto en la construcción de una sociedad más justa, igualitaria y sin violencias contra las mujeres y personas LGBTI+; donde el “derecho del revés”, sea derecho, dignidad y justicia social.